Mañana hago 2 meses que estoy en Portugal.

En este tiempo que llevo aquí, me he dado cuenta de que viajar es una manera constante de aprender, de conocer, de enriquecerse y de compartir otras culturas distintas, son otras formas de ver la vida, lugares nuevos y todo nuevo. 

No es fácil irse lejos y dejarlo todo atrás sin saber qué podrá pasar y emprender un rumbo nuevo hacia lo desconocido, pero también es bueno desaparecer un tiempo y darte cuenta de lo que de verdad sientes y quieres.

Ya me queda una semana para terminar las prácticas y bueno... Al principio estaba un poco desconcertada porque no entendía nada de lo que me decían y puede llegar a ser bastante frustrante, y eso que el portugués y el español es algo parecido pero no es lo mismo el portugués escrito que el portugués hablado, eso ya es otro mundo. Cuando escuchas a dos portugueses hablando, te quedas en babia porque no te enteras absolutamente de nada. Pero poco a poco cuando van pasando las semanas, algunas palabras se me fueron quedando. 

Se me ha hecho un poco raro el estar tanto tiempo fuera, ya que, aunque parezca raro, pues no he salido de Canarias nunca en mi vida y al principio lo pasé un poco mal, pero bueno, siempre hay días buenos y días malos, y 2 meses pasan volando, lo que importa es disfrutar de la experiencia. 

Respecto a la convivencia con los compañeros estuvo bien, con sus más y sus menos pero bien.

Con este Erasmus me llevo una gran experiencia, es bonita esa sensación de ver algo que nunca antes había visto. 

El Viernes fui con mis compañeros y con Yurena a visitar Oporto y está muy bonito aunque con mucha lluvia y viento, pero merece la pena visitarlo.

En cuanto las prácticas, empecé el Jueves 28 en una tienda de ropa deportiva, y el Viernes y hoy Lunes no había que trabajar porque aquí es fiesta.

Hoy hace 2 días que llegué con mis compañeros a Barcelos.

Ayer visitamos Barcelos por la mañana por la zona del centro, eso sí, si vienen a visitar Barcelos lo más que van a ver son gallos por todos lados.

Luego fuimos a Barcelinhos y por la tarde-noche fuimos a visitar Esposende, que es un pueblo cerca de Barcelos, con unas vistas muy bonitas a la puesta de sol.

Probamos los helados artesanales de Esposende y un dulce típico llamado Clariñas de Fão, estaba muy bueno, lo recomiendo por si quieren visitar este pueblo algún día.

Ya mañana empezamos con las prácticas.