Día 20, madrugamos para coger el tren hacia Girona. Una vez allí se incorporó a nuestra aventura mi hermana y despegamos a nuestro destino, Riga. Pudimos deleitarnos con unos paisajes y una puesta de sol espectacular. Nos despertamos ansiosas por ver la ciudad de día. Nos abrigamos bien y dimos un largo paseo por el casco antiguo conociendo varios puntos de nuestro interés. Uno de ellos fue la catedral, unos de los monumentos mas importantes del país, donde subimos a lo alto para ver las vistas del núcleo urbano. Otro de los lugares fue su mágico mercado cubierto. El detalle mas peculiar de este lugar es que sus hangares son en realidad cinco de los nueve que quedan en el mundo, utilizados durante la primera guerra mundial por las fuerzas aéreas alemanas. En él podemos encontrar a precios muy económicos todo tipo de hortalizas, frutas, pescados y carnes. Un lugar donde pasar una buena mañana. Fuimos en tren y llegamos hasta Sigulda a poco menos de una hora desde Riga. Allí pasamos todo el día conociendo su torre medieval, la cueva de Gutmanis y el castillo de Turaida... todos ellos rodeados de densos bosques dormidos debido a los intensos inviernos que soportan. Cruzamos su río en cablecar y pudimos ver algún animalito que otro. Después de caminar todo el día solo queríamos llegar a casa. Al día siguiente tocaba CELEBRACIÓN. 🎈 |